Que hacemos
En las últimas décadas, la deforestación de bosques y selvas de ribera y el uso inadecuado del suelo han contribuido a la disminución de los volúmenes y la calidad del agua, un bien natural insustituible en la vida humana.
El mal uso de los recursos hídricos pone en riesgo la vida de todos los seres vivos y los ecosistemas y afecta directamente a varias actividades humanas, además de la agricultura, la ganadería y las industrias que dependen del agua para obtener sus productos.
La falta de agua produce un efecto dominó, afectando a la población, la naturaleza y la economía.
Por eso, el programa tuvo la idea de mapear, conservar y recuperar los manantiales en los municipios miembros, con el fin de reducir la escasez de agua en las regiones donde tiene presencia. El programa aporta numerosos beneficios a los municipios consorciados, a la población y especialmente al medio ambiente.
Para la conservación de los manantiales y manantiales en las propiedades rurales, se deben adoptar medidas de protección del suelo y la vegetación, que van desde la eliminación de prácticas de quema, cercado del área e incluso el enriquecimiento de bosques nativos, además de evitar la contaminación del agua por desechos animales. y sustancias químicas, como pesticidas.
Propósitos:
- Identificar los manantiales para comprender el abastecimiento de agua del municipio;
- Evaluar el manantial a través del diagnóstico hidroambiental;
- Contribuir a la estructuración y consolidación de un sistema de gestión del agua;
- Ampliar la capacidad de los administradores y servidores para el seguimiento necesario para la protección del medio ambiente;
- Promover acciones de recuperación de manantiales que beneficien a las comunidades y cuencas.